Menú Principal

Leptospirosis

Prevención y control

Los casos sintomáticos deben ser tratados exclusivamente por un médico de acuerdo a su sintomatología y presencia de factores de riesgo. Se recomienda el uso de antibióticos (penicilina, ampicilina, doxiciclina, ceftriaxona) en forma precoz para evitar la progresión hacia la enfermedad severa, junto al tratamiento sintomático.

Para la prevención de leptospirosis en situaciones de alto riesgo de exposición, se recomienda la quimioprofilaxis con doxiciclina 200 mg por semana, durante cuatro semanas. Sus limitaciones son la fotosensibilidad, efectos secundarios gastrointestinales, y contraindicaciones para embarazadas y niños menores de 8 años. Por esta razón, debe ser indicada exclusivamente por un médico.

Las medidas de control deben estar orientadas a reducir los riesgos de proliferación de reservorios de Leptospira spp. y su impacto en el ambiente, junto con reducir el contacto directo con animales potencialmente infectados, o con tierra o agua contaminada con orina de animales infectados. Para ello, se recomienda:

  • Control sistemático de roedores en lugares de riesgo.
  • Asegurar la protección de las fuentes de agua de consumo, evitando su contaminación con orina de animales y mantención continua de alcantarillados.
  • Uso de elementos de protección personal (botas, antiparras, guantes de goma, overoles) para los grupos de riesgo: granjeros, trabajadores agropecuarios, de mataderos, carniceros, mineros, manufactureros o sanitarios, personal de laboratorio, Médicos Veterinarios, limpiadores de sistemas de alcantarillados u otras actividades en que pudiese existir contacto con roedores, o tierra o agua contaminados con sus orinas.
  • Disposición de alimentos en envases a prueba de roedores.
  • Mantención de cursos de aguas, evitando la proliferación de roedores y la formación de charcos de aguas estancadas.
  • Vacunación periódica de animales susceptibles, las que deben contener serovares representativos de la realidad epidemiológica local.
  • Educación de la población respecto a evitar contacto con aguas dulces superficiales que puedan estar contaminadas.
  • Consumir agua hervida si no se dispone de agua potable.

La Unidad de Zoonosis de la SEREMI de Salud en coordinación con otras áreas de la SEREMI o intersector según sea el caso (Epidemiología, Alimentos, Promoción, Salud Ocupacional, SAG) será responsable de las intervenciones ambientales en los lugares de riesgo identificados durante la investigación epidemiológica realizada en conjunto con la Unidad de Epidemiología, de tal forma de aplicar o asegurar la implementación en forma oportuna de medidas de intervención inmediata como por ejemplo, control de roedores, fiscalización, sumario sanitario, educación de medidas para minimizar riesgos, entre otros.

 
Referencias
1.- Mandell, Douglas, and Bennett’s principles and practice of infectious diseases / [edited by] Gerald L. Mandell, John E. Bennett, Raphael Dolin.—7th ed.
2.- Ministerio de Salud de Chile. Subsecretaría de Salud Pública. División de Planificación Sanitaria. Departamento de Epidemiología. Circular B51/10. Circular de vigilancia y control de leptospirosis. Santiago, 6 de febrero 2009.
3.- Organización Panamericana de la Salud. Zoonosis y enfermedades transmisibles comunes al hombre y a los animales: bacteriosis y micosis. 3º ed. Washington, D.C.: OPS, 2001. 3º vol. (Publicación científica y técnica Nº 580).

Actualizado el 01 de diciembre de 2022.